¿Es bueno quitarse las gafas de vez en cuando?
Si utilizas gafas de vista, seguro que alguna vez te has preguntado si llevarlas puestas todo el día perjudica a tu salud ocular.
Mucha gente afirma que después de estar usando sus gafas graduadas durante todo el día ve más borroso, o que tras un tiempo sus dioptrías han aumentado.
Debido a esta creencia tan extendida, muchos evitan usar sus gafas a diario, quitándoselas o reduciendo su uso a actividades puntuales como trabajar delante del ordenador o leer.
Sin embargo, a día de hoy no existe ninguna evidencia científica que demuestre este razonamiento. De hecho, se han realizado numerosas investigaciones que avalan una postura totalmente opuesta con respecto a esta suposición.
Por ejemplo, un estudio llevado a cabo en los años 60 con un grupo de niños que padecían miopía, demostró que aquellos que dejaban de usar las gafas o empleaban unas de menor graduación a la que les correspondía desarrollaron una mayor elongación ocular, empeorando su vista de forma considerable.
También se llevó a cabo en Finlandia otro estudio en los años 80 con un grupo de niños miopes. Después de separar a los niños en dos grupos, los que usaban gafas y los que no, se les pidió que realizaran tareas escolares, incluida la lectura de libros. Tras varios años realizando revisiones, se comprobó que la miopía había avanzado más en aquellos niños que no estaban usando gafas.
Posteriormente se les pidió a todos los niños que usaran sus gafas de forma habitual. El resultado fue claro: veinte años después, se comprobó que la miopía no había progresado notablemente en ninguno de ellos.
Por lo tanto, según los datos científicos que disponemos hasta ahora, llevar las gafas puestas durante mucho tiempo no empeora nuestra salud ocular.
Teniendo en cuenta esta información, es importante que no uses tus gafas menos de lo que deberías, ya que esto puede tener consecuencias negativas para tu vida cotidiana, como dolores de cabeza, descenso del rendimiento laboral o escolar y accidentes de conducción.
En definitiva, es bueno quitarse las gafas de vez en cuando, pero sólo durante breves descansos que no afecten a tu actividad diaria ni te obliguen a realizar sobreesfuerzos con la vista.
¿Por qué empeora la vista después de usar gafas graduadas durante mucho tiempo?
Ahora que ya sabes que llevarlas puestas con frecuencia no tiene por qué afectar a la salud ocular, quizás te preguntes por qué en muchos casos a pesar de llevar unas lentes correctamente graduadas la vista empeora. Este deterioro progresivo puede deberse a distintas causas:
–Envejecimiento. A medida que envejecemos, sobre todo a partir de los 40 años, el cristalino se va endureciendo, algo que provoca presbicia y agrava los defectos refractivos previos.
–Exposición a pantallas. Ya sea por ocio o por trabajo, cada vez pasamos más tiempo delante de dispositivos electrónicos como ordenadores, tablets o smartphones que resecan nuestros ojos y cansan la vista.
–Luz solar. Permanecer durante mucho tiempo expuestos al sol sin la protección adecuada de unas gafas de sol homologadas puede acabar dañando la retina a largo plazo.
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Según los datos científicos que disponemos hasta ahora, llevar las gafas puestas durante mucho tiempo no empeora nuestra salud ocular
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¿Es malo llevar gafas todo el día?
Aunque no sea perjudicial para la vista, muchas personas experimentan molestias al llevar las gafas puestas durante un tiempo prolongado.
Esto puede deberse al uso de unas monturas inadecuadas, un problema causado por el desgaste gradual de los materiales o incluso por un mal ajuste en la confección. Algunas de las consecuencias de llevar gafas mal adaptadas pueden ser dolor de cabeza, mala visión, o irritación en la zona nasal. Con el fin evitar este tipo de problemas, es fundamental tener en cuenta estos factores a la hora de comprar unas lentes:
–Puente nasal. Para que las gafas sean cómodas, las almohadillas del puente nasal deben ser firmes y su posición con la nariz ser la correcta. En caso contrario, resbalarán fácilmente hacia abajo.
–Varillas de las gafas. Lo ideal es que se ajusten de tal manera que no ejerzan presión sobre la sien y se apoyen firmemente en las orejas.
–Cristales. Utilizar unos cristales demasiado gruesos puede provocar molestias, ya que incrementan el peso de las gafas. Empleando cristales finos, el confort aumentará considerablemente.
Si sientes molestias al usar tus gafas actuales y estás pensando en cambiarlas, pide cita en cualquiera de nuestras tiendas Cottet y uno de nuestros expertos te ayudará a encontrar las mejores para ti.
